¿Qué dice la psicología sobre las personas que amenazan con frecuencia con separarse o divorciarse de su pareja?

Ante este tipo de situaciones en la relaciones, es importante buscar la ayuda de expertos como terapeutas de pareja, por ejemplo.

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"Mirá que me separo ¿eh">Foto: Freepik.

Algunas personas, cuando están enojadas, suelen decir palabras hirientes a sus parejas. Una de ellas es amenazar con separarse cuando ocurren este tipo de conflictos. Según la psicología, muchos lo hacen con el fin de atemorizar y manipular al otro.

La psicóloga y directora del Instituto Psicode, Marina García Fuentes, explicó que “En el momento en que empezás una relación, asumís la posibilidad de que se termine. La separación es una realidad. Algo bastante obvio, pero esta obviedad se hace insufrible cuando tenés una pareja que constantemente utiliza como estrategia de poder y control el amenazar con separarse”.

Cuando suceden este tipo de situaciones, las personas, por miedo a la pérdida y el abandono, agachan la cabeza y se anulan ante el otro y esto con el tiempo comienza a afectar la relación y no se dan cuenta de que hay algo que no está funcionando bien, según comentó García.

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Este tipo de comportamiento puede llegar a ser contraproducente en una relación.
Foto: Unsplash.

Si bien es cierto que las relaciones tienen sus conflictos y las parejas no son perfectas, por lo que las discusiones son inevitables, la forma en la que la gestionan suele marcar una diferencia entre si es sana y exitosa o si es dolorosa, de acuerdo con el sitio web Psychology Today.

Todas las personas en algún momento de su vida se habrán arrepentido de decir alguna palabra o frase hiriente al momento de una discusión, pero cuando estas se vuelven reiteradas es cuando comienzan a aparecer los problemas, ya que llegan las inseguridades, la ansiedad y el estrés.

Este tipo de situaciones hace que la relación comience a quebrarse, ya que aparece la manipulación y, en algunos casos, la violencia, tanto física como verbal. Es en ese punto donde la persona debe aprender a diferenciar y saber cuándo salir de ahí.

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Foto: Freepik.

“Amenazar con separarse solo lleva al desgaste emocional de ambos. Alargando un proceso de sufrimiento que terminará en ruptura tarde o temprano y disminuirá las posibilidades de mantener la amistad, cuando el tiempo lo permita”, agregó García.

Ante este tipo de situaciones, la página ‘Psicode Instituto de Psicología y Desarrollo Personal’ comentó que el objetivo es aprender a reconocer esos momentos y controlar los impulsos. Además, es importante que sepa cuándo pedir ayuda, para que la relación no comience a desgastarse.

“Cambiar las amenazas de separación por un 'Vamos a buscar una solución' o si se acabaron las opciones, plantear la ruptura”, concluyó García.

Wendys Pitre Ariza, El Tiempo - GDA

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