Opinión
El caso del exsenador, más allá de sus particularidades, deja en evidencia falencias muy graves del sistema, y que es imprescindible cambiar a fondo el proceso penal que tenemos hoy.
Principios como el de la libertad de trabajo, el de propiedad, o mismo el de autonomía de la voluntad, fueron retaceados o arrasados.
Pueden evitarse más impuestos a las jubilaciones.
Parece poco serio que se quiera encandilar a la población reflotando la idea de Casupá.
El contrabando y el mercado negro aplauden de pie a la ministra Lustemberg.
Editorial
Ecos