Este lunes, tras cinco años de espera, comenzó el juicio por la Operación Océano y ya se dieron los primeros cruces entre la Fiscalía y las defensas. La fiscal del caso, Mariana Alfaro, pidió remediar un "error" que había en el documento en el que se formulan las bases sobre las que se hará el juicio —auto de apertura— porque algunos fragmentos habían quedado "mal transcriptos", según reconstruyó El País.
El abogado Andrés Añasco intervino ante el pedido de Alfaro y le pidió al juez Huberto Álvarez que rechace el planteo. Argumentó que ese documento no podía ser alterado porque ya pasó el plazo en el que podía impugnarse y, además, porque es de autoría de otro juez (de garantías). El auto de apertura es importante porque es el puntapié del juicio, establece los hechos que se van a juzgar y las pruebas que se van a utilizar para hacerlo.
Aunque Álvarez le dio la razón a la defensa y se negó a modificar el documento, la puja se reeditó unos minutos después. La Fiscalía, en sus alegatos de apertura (que son orales), se refirió a los hechos que el juez no le había permitido modificar. Sin embargo, en ese momento Álvarez habilitó a que la fiscal hablara sobre el tema.
Si bien los hechos quedaron incorrectamente plasmados en el documento, sí ingresaron a la causa las pruebas que —según Fiscalía— los sustenta.
La forma en que serán juzgados los hechos que quedaron mal inscriptos será una decisión de Álvarez.