Redacción El País
El gobierno de Yamandú Orsi dio a conocer este viernes cuáles serán los nuevos precios de los combustibles que comenzarán a regir a partir de este domingo 1° de junio.

La decisión fue comunicada en conferencia de prensa por el ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, y la ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona.

En el caso de la nafta, pasará a costar $78,47 por litro, por lo que tendrá una baja de $0,07, mientras que el gasoil pasará a costar $47,03, con una caída de $2,39. El supergás mantendrá incambiado su precio.

La resolución del gobierno respecto a los nuevos precios —que comenzarán a regir desde las 00:00 del domingo— se tomó luego de que la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) emitiera un informe sobre el Precio de Paridad de Importación (PPI).

Dicho informe indicaba que en el caso de la nafta 97 puesto en planta de distribución de La Tablada el PPI bajó 1,41% y en el caso de la nafta Súper 95 cayó 1,48%.

El gasoil, tanto en el caso del 50S como en el 10S, cayó 5,39%, y en el caso del supergás, el PPI mostraba una reducción de 2,74%.

Este dato es uno de los insumos que toma el gobierno para analizar el precio final máximo de venta al público.

Durante la conferencia de prensa, Oddone y Cardona oficializaron cuatro anuncios: además de los nuevos precios de los combustibles, se refirieron a un cambio en la metodología de fijación de precios.

Los anuncios de nuevos precios de los combustibles ya no serán mensuales, previo al primer día de cada mes, sino cada 60 días para dar mayor estabilidad. No obstante, a fines de junio habrá un nuevo anuncio porque allí comenzará el primer bimestre con este criterio: el de julio y agosto.

Sin embargo, la ministra Cardona dijo que el PPI seguirá funcionando como factor de referencia y la Ursea continuará divulgando su informe todos los meses.

Foto: Darwin Borrelli

Por otro lado, se estableció que el denominado "factor de estabilización" que está previsto en un decreto del año 2021, emitido durante la gestión de Luis Lacalle Pou, se fijará en $1,5 por litro de nafta y gasoil y se revisará de forma anual.

Cardona dijo que "en los primeros meses del gobierno anterior" se había fijado en $2,97 y "no se predeterminó más". Ahora se estableció que ese precio baje casi a la mitad y que se actualice todos los años.

"Esto no hace caja, no es para que sobre dinero, es para que la canasta de energéticos se equilibre entre sí", explicó y agregó que irá destinado al subsidio del supergás.

Foto: Darwin Borrelli

Finalmente Oddone fue el encargado de anunciar la cuarta medida, y es que el manejo de la volatilidad de los precios internacionales de los combustibles se hará mediante topes.

Para "suavizar las variaciones" se indicó que si la diferencia entre el precio vigente y el precio de referencia, que es el PPI más el factor de estabilización, es menor a 7%, entonces el precio se ajusta totalmente. En cambio, si la variación debiera ser mayor a ese porcentaje, se aplicará un tope. Esta medida se tomará tanto cuando los precios deban subir o bajar en un porcentaje mayor a 7%.

"La política pública interviene para que un efecto extraordinario del mercado internacional no afecte la toma de decisiones o el consumo", dijo Oddone, y agregó que "esas variaciones son poco frecuentes, si ocurren están asociadas a un evento transitorio" y el gobierno no lo quiere "trasladar" al precio final porque sería una señal "dificultosa".