El chato partido que complicó a Peñarol: el dato alentador y por qué quedó condicionado en Copa Libertadores

El equipo de Diego Aguirre no pudo con Vélez Sarsfield, empató sin goles y a pesar de estirar un largo invicto como local en este torneo, quedó segundo en el Grupo H.

Compartir esta noticia
Tito Villalba se lamenta en el partido entre Peñarol y Vélez por Copa Libertadores.
Tito Villalba se lamenta en el partido entre Peñarol y Vélez por Copa Libertadores.
Foto: Estefanía Leal.

Sin su gente en las tribunas del Estadio Campeón del Siglo y mostrando un flojo nivel de juego, Peñarol fue superior a Vélez Sarsfield pero ni así pudo desnivelar en el marcador y el empate sin goles lo dejó como segundo en el Grupo H de la Copa Libertadores.

El equipo de Diego Aguirre comenzó mejor, generó varias llegadas de peligro sobre el arco de Tomás Marchiori y hasta los 20 minutos de partido, no fue un aluvión, pero sí complicó y bastante a la zaga de un Vélez que la pasó mal y que bien pudo encontrarse con algún gol mirasol.

Un par de remates de Leonardo Fernández, otro del Cangrejo Cabrera y una jugada que casi termina en gol en contra fueron las aproximaciones del Carbonero, que no solo llegaba sino que además, mantenía al rival lejos del arco de Guillermo de Amores.

Pero a partir de los 20’ y con una jugada preparada del Fortín tras un tiro de esquina desde la derecha del ataque que terminó con un remate de Maher Carrizo afuera, la cosa cambió en el Campeón del Siglo.

La visita tuvo un tiro libre peligroso de Braian Romero luego de una durísima falta de Léo Coelho al borde del área sobre Francisco Pizzini y De Amores volvió a responder muy bien a los 28’.

Diego Aguirre en el partido de Peñarol vs. Vélez en el Campeón del Siglo.
Diego Aguirre en el partido de Peñarol vs. Vélez en el Campeón del Siglo.
Foto: Estefanía Leal.

Luego, el partido cayó en un pozo y recién a los 41’ volvió a tener una incidencia que despertó la noche: un zapatazo de Leandro Umpiérrez desde afuera del área que pasó muy cerca del horizontal.

Cuatro minutos después y de pelota quieta, Vélez tuvo su chance con un cabezazo de Damián Fernández que atajó De Amores en otra buena intervención.

Parecía que al complemento Peñarol iba a salir con alguna variante, pero Diego Aguirre respaldó a los 11 que eligió para empezar el partido y no hizo variantes hasta los 57’, minuto en el que mandó a la cancha a Diego García por Leandro Umpiérrez. El Demonio entró algo entreverado e impreciso.

Luego, visto que el equipo no levantaba su nivel y que sobre todo, no generaba el peligro de los primeros 20’, la Fiera mandó a la cancha a Lucas Hernández y a Tito Villalba por Maximiliano Olivera e Ignacio Sosa respectivamente cuando transcurrían 72’, y ya en la recta final del juego, puso a Felipe Avenatti y a David Terans por Maximiliano Silvera y Damián Suárez –de correctísimo partido– a los 82’.

Pero el gol nunca llegó. Alguna corrida de Villalba, pases filtrados de Leo Fernández y algún intento de Terans quedaron en la nada misma en esa recta final de un partido que por momentos fue un dolor de ojos.

Algunos consejeros de Peñarol y allegados que tuvieron la posibilidad de ver el encuentro desde la Tribuna Frank Henderson se dedicaron a alentar al equipo en los últimos minutos al grito de “¡vamo Peñarol, vamo!”, pero eso no fue suficiente.

Eric Remedi con Peñarol en el Campeón del Siglo
Eric Remedi con Peñarol en el Campeón del Siglo.
Foto: Estefanía Leal

Del otro lado, Vélez hacía su negocio y esperaba bien parado atrás, controlando y escalonando bien en la marca a Leo Fernández, pero también esperando para contragolpear.

Y fue así que alguna chance tuvo, como la de Maher Carrizo entrando al área y sacando un remate que Guillermo de Amores mandó al córner.

Con un chato nivel el partido se esfumó y la chance de Peñarol de ser primero del Grupo H también.

A destacar, el muy buen partido de Eric Remedi en la mitad de la cancha con un tremendo despliegue con y sin pelota, la muy buena noche de Nahuel Herrera en la zaga central y otra notable actuación de Guillermo de Amores en el arco con intervenciones importantes.

El lamento de Leonardo Fernández en el partido entre Peñarol y Vélez Sarsfield por Copa Libertadores.
El lamento de Leonardo Fernández en el partido entre Peñarol y Vélez Sarsfield por Copa Libertadores.
Foto: Estefanía Leal.

El futuro de Peñarol quedó condicionado, pero hay un dato alentador

Peñarol completó una muy buena fase de grupos en la que arañó el primer lugar del Grupo H, pero fue segundo y ahora, de movida, ya sabe que quedó algo condicionado de cara a los octavos de final.

Es que sea cual sea el rival del mirasol –algo que se conocerá este lunes en el sorteo de las llaves que será en Asunción del Paraguay–, el equipo de Diego Aguirre deberá definir la serie de los 16 mejores como visitante.

La buena noticia es que el Carbonero también sabe que en la ida de los octavos de final jugará con público en el Campeón del Siglo, algo más que importante ya que anoche frente a Vélez terminó de cumplir la sanción de tres partidos a puertas cerradas.

Peñarol cumplió un objetivo –clasificar a octavos– y no el segundo –ser primero–, pero ahora empieza otra Copa Libertadores y la ilusión sigue intacta, sobre todo porque las últimas dos veces que superó la fase de grupos lo hizo como segundo al igual que ahora. En una llegó hasta la final (2011) y en otra hasta semis (2024).

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar